miércoles, 30 de marzo de 2022

EL DRAGÓN QUE PERDIÓ LA MEMORIA, CÓMIC

 Cuenta la leyenda de que un dragón que vivía a las afueras de un pueblo llamado Alfajarín. Este dragón nunca se sabe donde vivió. Se dice que se llamaba Belindo, y sobre todo hablaban muy mal de él, decían que por las noches bajaba de las montañas al pueblo a incendiar las cosas y a romperlas.
Cuatro niños de 11 años un día decidieron no ir al cole para ir a buscar al dragón del que tanto hablaban, después de un largo rato caminando intentando buscar la cueva, decidieron parar a comer, cuando de repente escucharon unos ruidos, como si alguien estuviera llorando, cuando terminaron de comer fueron a ver qué era eso.
Al llegar al lugar encontraron una cueva, al entrar se encontraron la casa del dragón, con un sofá, una estantería llena de libros… Los niños se sorprendieron al ver entrar al dragón, pasaron mucho miedo, pero al ver que no les hacía nada se fueron acercando mutuamente. 
Al verse dijeron esto:

FINAL 1:
Hola, ¿cómo te llamas? -dijeron los niños-
Mmmm, Belindo… ¿Qué hacéis aquí todavía, no me tenéis miedo? -preguntó el dragón-
La gente en el pueblo dice que eres muy malo, porque destruyes las cosas y las incendias, pero queríamos asegurarnos que eras así. -respondieron los niños-
Sentaros, ¿queréis algo? ¿Por cierto, no deberíais estar en el colegio? -preguntó el dragón-
Gracias, si no das un vaso de agua te lo agradeceríamos. Bueno… Deberíamos pero, necesitábamos averiguar si eras malo. -dijeron los niños-
Tomar el agua, yo nunca he ido al pueblo, y menos a incendiar cosas y destruirlas, pero yo se de alguien que lo puede estar haciendo… -les dijo el dragón-
¿Quién? - preguntaron los niños asombrados-
A 2 km de aquí hay una granja y el otro día me destruyeron la cocina entera, supongo que serán esos animales. -les respondió el dragón-
¡Tenemos que ir al pueblo a decirlo! -exclamaron los niños nerviosos-
¡¡No podéis ir a decirlo!! -les respondió el dragón-
¿Por qué? -preguntaron los niños-
Porque no nos creerían… Total qué más da, si nadie sabe donde vivo, no me pueden hacer nada y no se atreverían. -dijo el dragón muy triste-
Bueno vale… Pero te prometemos que te vendremos a ver todas las semanas una vez. -le aseguraron los niños-
¡Gracias chicos! -exclamó el dragón ilusionado-
Los niños se fueron a su casa a comer tranquilos, sabiendo que el dragón era bueno, y cumplieron su promesa todos las semanas subían todos juntos a la cueva sin que nadie se lo supiera para verle, hasta que un día se encontraron al dragón muerto en su sofá…

FINAL 2: 
De repente el dragón se puso muy furioso, empezó a pegar golpes a pegarles, los niños intentaron huir como pudieron pero hubo uno que se tropezó y cogió el dragón por la pata al niño. Sus amigos al ver esto, cogieron rápidamente un palo que tenían al lado y con él, le dieron un pequeño golpe en la pierna, el dragón soltó al niño y empezaron a correr para ir al pueblo a contarle a todo el mundo que tenían a un dragón muy peligroso.